La canciller alemana, Angela Merkel, se pronunció a favor de mantener la obligatoriedad de usar mascarilla en espacios públicos donde no se pueda mantener la distancia mínima.
Así, respondió al debate surgido sobre un pronto levantamiento de esta medida, al menos en los comercios.
OBLIGATORIEDAD, NECESARIA
El portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, reiteró la postura de la canciller y del gobierno de que en cualquier lugar de la vida pública donde la distancia mínima no quede garantizada:
las mascarillas son un medio importante e irrenunciable para mantener bajo el número de contagios.
Así que la idea es mantener la obligatoriedad de llevar cubrebocas, más ahora, en las vacaciones de verano, durante las que la movilidad (local y foránea) está de nuevo aumentando con fuerza.